Tratamiento con peeling cosmético renovante de la piel.

Beneficios de exfoliar la piel

La exfoliación o eliminación de células muertas del cuerpo es un proceso esencial para el cuidado de la piel que ayuda a acelerar su renovación, estimula la hidratación y circulación, contribuye a la desaparición de manchas y favorece la absorción de los productos cosméticos. El resultado es una piel más luminosa, suave y con apariencia más joven.  

Acción de los diferentes tipos de peeling

Los peelings actuarán de forma superficial, media o profunda según la naturaleza de los mismos. Técnicamente se clasifican en físicos o mecánicos, enzimáticos, químicos o biológicos.

• Peeling mecánico: Se utilizan micropartículas de jojoba, hueso de melocotón y otras sustancias que al friccionar sobre la piel ayudan a eliminar las células muertas y aportar suavidad en la superficie de la piel.  
• Peeling enzimático: Tiene un efecto queratolítico, no es necesario trabajarlo y aporta mucha luminosidad. Actúa en el último estrato de la capa córnea.
• Peeling químico: Se utilizan productos químicos como los alfahidroxiácidos y, entre ellos, el ácido glicolico que según su concentración y pH actúan en capas bastante profundas de la epidermis. Es ideal para disminuir marcas, cicatrices, manchas, etc.

La frecuencia recomendada para la exfoliación varía en función del peeling a utilizar. El peeling mecánico se puede realizar una vez por semana pero los químicos de alta concentración se utilizan cada dos semanas. En el caso de una piel muy queratinizada, se puede realizar una triple exfoliación uniendo varios peelings.

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